Que fácil es patear el juego de ajedrez; Que fácil es envejecer de dieciséis Que fácil es que salga callo en este ser Que fácil es ya no volver a agradecer amanecer, Perder el gozo por cualquier estupidez, que fácil es... Que fácil es volverse ciego a los destellos del amor, Con el meñique pretender tapar el sol Para escondernos de su tibio resplandor. Que fácil es a cinismo disfrazar de madurez Desarrollar sutiles formas de ofender, sin parecer... Que fácil es hacer castillos para huir de Los demás, ir paso a paso rumbo a la soledad Luego nunca regresar, nunca regresar... Que fácil es volverse ciego a los destellos del amor, Con el meñique pretender tapar el sol y Y Tercamente sinismarnos para ignorar la voz de Dios Que fácil es hacer a un lado la inocencia y el calor, Volverse amigo del orgullo y la ambición Y sin querer ser lo que nunca nos gustó, Que fácil es ganar el mundo y perder el corazón. Que fácil es ganar el mundo y perder el corazón.