Siempre recogí mis trozos sin ayuda Pues prefiero la soledad que vivir entre dudas Pues prefiero el dolor que envuelve la verdad más cruda Que el falso amor que habita tras de los labios de Judas Nuestro amor no fue más que un ramo de espinas Un baile de máscaras sobre un campo de minas Dos almas descalzas, ciegas entre la neblina Deidades paganas creando su propia doctrina Pero al final todos los templos arden Así que ¿por qué el nuestro iba a salvarse? Hoy no quedan ni las cenizas Saltaron junto a nuestras promesas por la cornisa Y cada quien a sus asuntos Como puntos que jamás se cruzaron en este mundo Nuestro pasado agoniza, nuestro futuro difunto Mientras cumplimos solos lo que un día soñamos juntos Tú ya no eres suficiente para mí Me heriste y aún esa no es la mala noticia No sé si quiero seguir Yo sigo aferrado al demonio de ti Sé que lloras si me piensas, aunque cuando me veas no hables Que aún respiras las esporas de esos tiempos memorables Que quieres volver las horas como yo, pero ya es tarde Debe haber fuego en mi cora, pues todo lo que amo arde Pudimos ser eternos como el arte Aprender del error y envejecer en alma y carne Pero preferiste apuñalarme por la espalda Y luego culparme por no mirarte Lo que teníamos era sagrado Un jardín de plenitud donde se respiraba paz Pero le prendiste fuego en cuánto los tiempos cambiaron Y hoy solo es tierra quemada, un dios sin creyentes ni altar Recordar no es algo malo, pero el futuro está al frente Pues el agua pasada no calma la sed del presente Ten el amor que te tuve ya no lo necesito Nos vemos, dos calles después del infinito Tú ya no eres suficiente para mí Me heriste y aún esa no es la mala noticia No sé si quiero seguir Yo sigo aferrado al demonio de ti