El vino entibia sueños al jadear Desde su boca de verdeado dulzor Entre los libros de la buena memoria Se queda oyendo como un ciego frente al mar Mi voz le llegará, mi boca también Tal vez le confiaré que eras el vestigio del futuro Rojas y verdes, luces del amor Prestidigitan bajo un halo de rouge ¿Qué sombra extraña te ocultó de mi guiño? Que nunca oíste la hojarasca crepitar Pues yo te escribiré, yo te haré llorar Mi boca besará toda la ternura de tu acuario ♪ Parada estoy aquí, esperándote Todo se oscureció, ya no sé si el mar descansará Habrá crecido un tallo en el nogal La luz habrá tiznado gente sin fe Esta botella se ha vaciado también Que ni los sueños se cobijan del rumor Licor, no vuelvas ya, deja de reír No es necesario más, ya se ven los tigres en la lluvia