Las tormentas provocadas por los astros no nos detuvieron Nos levantamos con ira Nuestros ojos fuego eran Nuestras manos y hechizos, su lapida ¿ Pensaste acaso que seríamos simples moldes Vacios, donde verterias tus nociones y valores? Los astros temblaron Llevamos su guerra al cielo Cortamos sus alas Quemamos sus estatuas Los planetas fueron testigos de su caida Uno por uno fue juzgado con su mismo martillo Cada hechizo lanzado es la voz de nuestras antepasadas Una rafaga de cuerpos los despedazo Esa nuestra rabia La guerra no termina acá Aullidos de la noche Graznidos de la muerte Nosotras somos las hijas de las brujas que no pudiste quemar