¿Por qué ibas a querer enredarte en la cola del diablo? Si es tan fácil ser tu propio confesor Si la excusa es tu aire, tu pan de cada día. Tanta pena por querer necesitar. ¿Por qué ibas a creer que esta vez sería distinto? Si jamás entendiste el libreto a interpretar Consultaste a tus gurúes para luego evitar sus consignas. El aire cruje, no escucharlo es tu crueldad. ♪ ¿Por qué ibas a esperar que el destino te arregle la vida? Si hasta el deseo te pesa, ¿por qué ibas a intentar confrontar? Mejor esquivarlo, mejor evitar la salida. Creyendo que amabas causaste más daño que dicha Tanta pena por querer necesitar.