Dice el Señor "No andes preocupado por tu vida Por lo que vas a comer y beber Ni por tu cuerpo o con qué te vas a vestir" ¿No es más importante la vida que el alimento Y más valioso el cuerpo que la ropa? Fíjate en las aves del cielo No siembran ni cosechan No guardan alimentos en graneros Y así el padre del cielo, tu padre, las alimenta ¿No vales acaso tú mucho más que las aves? ¿Crees que por mucho preocuparte Puedas añadir un centímetro a tu estatura? ¿Y por qué te preocupas tanto por la ropa? Mira cómo crecen las flores del campo Y no trabajan ni se fatigan Yo te digo que mi Salomón, con toda su riqueza Se pudo vestir como una de ellas Y si Dios viste así a las flores silvestres Que hoy brotan y mañana se marchitan ¿No crees que hará mucho más por ti? No andes tan preocupado, ni digas "¿Tendré algo de comer o qué beberé?" "¿Tendré ropa para vestirme?" Los que no conocen a Dios se afanan por esas cosas Pero el padre del cielo, tu padre Sabe que necesitas todo eso, por eso Busca primero el Reino y la justicia de Dios Y se te darán también todas esas cosas No te preocupes por el día de mañana Pues el mañana se preocupará por sí mismo A cada día le bastan sus propios problemas Busca primero el Reino de Dios y su justicia divina Y por añadidura lo demás se te dará Aleluya, aleluya ♪ Aleluya, alelu-aleluya Aleluya, aleluya Aleluya, alelu-aleluya Aleluya, aleluya