El pueblo no es rencoroso, más tiene buena memoria Que triste es que, mi país, con sangre escriba su historia Por unas mentes perversas, que ambicionaron la gloria Primero en Guadalajara, a un cardenal lo mataron Balas de un cuerno certero, el cuerpo le destrozaron Y después para engañarnos, un cuento nos inventaron Después siguió un candidato, que para morir fue electo Que él sería el crimen perfecto, algunos lo imaginaron Pero fue tanta tormenta, que hasta en los pinos temblaron En la calle de la fragua, a un guerrerense mataron Por sus lazos con la corte, el cuñado le llamaron Otra vez en doble fuego, hasta en los pinos lloraron México lindo y querido, tesoro de mucha gente En Chiapas un comandante, ha organizado su gente Y en Guerrero demostraron, también hay hombres valientes No hay fecha que no se cumpla, ni poder que no se acabe Como el rey salió corriendo, dejo un hermano olvidado En su sexenio tres muertes, le mancharon el reinado