Me tuerzo, me inclino, me caigo, me hundo Se derrumba mi mundo sin rumbo No es fijo ese dónde al que yo me dirijo y a cada segundo confundo Llegan lágrimas aquí de lo profundo Tengo dudas que duelen si pregunto Tengo miedos que atormentan lentamente A los sueños de mi corazón vagabundo De lo que no se llevó el viento De lo que quedó tras el tiempo Me quedo con el aroma de las rosas Porque hay cosas de las que me arrepiento Tengo que volver a aprender a pensar Tengo que volver a aprender a olvidar Tengo que volver a aprender a vivir Tengo que vivir y volver a aprender a amar A mi marcha Animar al Ibarra, limpiarle la cara de escarcha Descorchar, soportar la avalancha Borrar todo rastro de mancha No hay orden, no por aquí cerca Conozco el percal, la vida terca y Perra guerra mental, despiértate ya Todo es mental Todo es Todo es mental Todo es cómo lo percibes Vivo sin vivir en mí Sigo sin poder sentir No sé lo que tengo que hacer Daría lo mismo si volviera a nacer No sé, quizás quisiera no ser Lo que querría es dejar de toser Más que existir, subsisto Más que embestir, resisto, joder No amo, ni siento, ni padezco No veo que crezca, creo que envejezco Lento de reflejos, lejos del mejor verso que probé estoy Tengo mi alma en la sombra esperando una luz Quiero bajar de la cruz Siento que pierdo la juventud Rezo en la noche por mi salud Mental Mental Despierta Mental Despierta Triste, sólo tengo ojos para mí Triste Sólo Triste, sólo tengo ojos para mí Triste Triste, sólo tengo ojos para mí Triste Sólo Triste, sólo tengo ojos para mí Triste