! Olé, Olé, los cocidos buenos! ¡Que me sirvan otro cocido, que me he quedao como nuevo! No me hable usted de los banquetes que hubo en Roma Ni del menú del Hotel Plaza en Nueva York Ni del faisán ni los foagrases de paloma Ni me hable usted de la langosta Thermidor Porque es que a mi sin discusión me quita el sueño Es mi alimento y mi placer La gracia y sal que al cocidito madrileño Le echa el amor de una mujer Cocidito madrileño Repicando en la buhardilla Que me huele a hierbabuena A verbena en Las Vistillas Cocidito madrileño del ayer y del mañana Pesadumbre y alegría de la madre y de la hermana A mirarte con ternura Yo aprendí desde pequeño Porque tú eres gloria pura Porque tú eres gloria pura ¡cocidito madrileño! Dígame usted dónde hay un cuadro con más gracia Con el color que da la luz del mes de abril Cuando son dos y están debajo de una acacia Y entre los dos un cocidito de albañil Cuando el querer de la mujer le dice al dueño De su hermosura y su pasión Toma mi bien tu cocidito madrileño Que dentro va mi corazón Cocidito madrileño Repicando en la buhardilla Que me huele a hierbabuena A verbena en Las Vistillas Cocidito madrileño del ayer y del mañana Pesadumbre y alegría de la madre y de la hermana A mirarte con ternura Yo aprendí desde pequeño Porque tú eres gloria pura Porque tú eres gloria pura ¡cocidito madrileño! ¡cocidito madrileño!