Marchan sedientos, harapientos Sueños parecen enterrar La luz agoniza en sus ojos Bajo el pálido sol Su vida es tan absurda Y penosa como tortura Cada lágrima es otra piedra Para edificar su sepulcro Cicatrices interiores Marcan con desilusión Ser la infeliz imagen De esta inmunda tradición Dejaste un mundo Tan sombrío y opaco Donde nadie reinará Bajo este suplicio Hambrientos codician las alturas Ese mundo de fantasía y mentiras Se fue la esperanza de un mejor día Sólo la muerte mitigará ese dolor Río rojo... Rojo de sangre Río rojo... Rojo de sangre Dejaste un mundo Tan sombrío y opaco Donde nadie reinará Bajo este suplicio... Río rojo... Rojo de sangre Río rojo... Rojo de sangre