Míranos juntos, saludando al cielo. Al unísono, perdidos en el tiempo. Un pueblo extraño con raíces secas Se aproxima cuando caminamos, Y hace frío para dos almas desnudas, Pero las piedras no son tan duras. Pero las leyes son para romperlas Bajo el alero de la alegría. Dame un segundo para respirar hondo, Para ubicarme y abrir los ojos. Es cuestión de tiempo para llegar a buen puerto Por vías hechas, Hechas de neuronas. Y si me encuentras despierto Bajo el sol nocturno, Dame espejos para ver, Dame espejos para ver el futuro. Dame sólo cinco minutos, Dame sólo cinco minutos. Dame sólo cinco minutos. Dame sólo cinco minutos.