Soy de un lugar donde cuecen el pan A la orilla de un sueño que lucha el amor. Tengo del negro y de España su luz Y una historia bien corta que se hace sentir. Vengo del centro del mar, Siento el sur más que el norte Y el rojo me cruza la sien. Soy de donde soy, aunque me encuentre donde esté, Aunque la noche cubra el cielo y haya crisis con la fe. Soy de donde soy, de donde habita el corazón, Donde se sueña con palomas y se muere por amor. Sé de la mano tendida al pasar, De la mano que ofrezco sin mucho girar, Sé de caminos de vidrio y neón Tan veloces que al cabo han perdido el andar. Sé que no hay sueño barato, ni gris, Ni riqueza que brote de un cuerno feliz. Cuento con armas que de imaginar Quienes tienen mi patio podrían enfermar, Cuento, repito, con la soledad De mi sangre, mi gente, mi brío y mi verdad. Cuento con ese país del amor, Cuyas alas se extienden por cuanto lugar.