Una botella de vino en la guantera de mi auto Y había otras tres dentro mío Ya no era yo era el diablo. Ella viajaba conmigo siempre en el asiento de al lado Pero yo estaba ya muy borracho y no podía controlarlo. Todo se volvió rojo y desesperante Yo le hablaba pero no me hablaba ya no respondía. A menudo en mis sueños veo su Cuerpo sin vida desparramado en el suelo, Ya no hay consuelos que sirvan!!! Y yo rendido a sus pies pidiendo Perdón por mi estupidez y por su dolor. El cielo me escuchó y lloró conmigo... Todo se volvió rojo y desesperante Yo le hablaba pero no me hablaba ya no respondía. Todo se volvió rojo y desesperante Yo le hablaba pero no me hablaba ya no respondía. Todo se volvió rojo y desesperante Yo le hablaba pero no me hablaba, ya no me hablaba más