En cualquier sitio, él camina solo Ella ya marchó Las olas del mar van y vienen Mientras él sigue esperándola de pié Vuela la gaviota dejando recuerdos de amor Que él nunca olvidó Siente frío cada amanecer Y se ve su estrella brillar cada anochecer Sin ella, no sabe qué hacer Sin ella, no merece la pena vivir Sin ella, no existe el placer Señor cuando muera dirige mi alma Porque moriré por encontrarla, señor Por favor perdona por dejar este cuerpo Ya solo vivo de lamentos sin valor Días nublados aliento de vida se me va de las manos Suave brisa no haces más que dejarnos Ramas que mueve el viento, seres que nacen en un mismo suelo Mientras la muerte acecha en ellos Perdido el tiempo buscándote No entiendo el porqué, tanto tiempo de dolor Olas que rompen en tu pared Dentro de mí brotándome desde lo más profundo de mí ser Sin ella, no sabe qué hacer Sin ella, no merece la pena vivir Sin ella, no existe el placer Señor cuando muera dirige mi alma Porque moriré por encontrarla, señor Por favor perdona por dejar este cuerpo Ya solo vivo de lamentos ¡sin valor!