No tengo porque enfrentarme a los juicios tontos de la incertidumbre Me persiguen por la calle con luces azules, con luces azules Aunque suela equivocarme y aunque me culpen, tengo mi refugio No tengo porque explicarme a oídos sordos Llueve de verdad, fuego Escampa y luego deja un mundo nuevo Sagrada balanza Estas quebrada Todos en el aire Acantilados, fríos desolados Acantilados, siempre esperándonos