Prefiero mí Cristo al vano oropel Prefiero su gracia a riquezas sin fin A casas y tierras prefiérole a Él Será de mi alma fuerte paladín. Antes que ser rey de cualquier nación Y en pecado gobernar Prefiero a mi Cristo, sublime don Cual el mundo no ha de dar No quiero el aplauso del mundo falaz Prefiero en las filas de Cristo servir La fama del mundo es liviana y fugaz Prefiero por siempre a Jesús seguir