Aunque el viento se lleve las hojas Y los árboles sombra no den No es tan triste el otoño, es bueno pensar Nuestra vida tambien renovar Desechando lo malo en lo bueno Crecer, florecer en amor y en verdad Y al invierno quitarle lo frío Y encontrar el calor del hogar Abrigarse en su sol, donde brille el amor Compartiendo con todos el pan Y una brasa arderá desde tu corazón Soledad y dolor quemarás Y la vida es un tren que debes detener En las cuatro estaciones que ves Cada cual con su olor, tú le das el color Dios te espera, siempre, en el andén Y te da la madera, el fuego y el carbón Tú le entregas vagones de fe ♪ Floreciendo la primavera Vuelve a tu alma la juventud Tienes ganas de dar, de crecer y de amar Ya no sientes en tu hombro la cruz Quieres ver y sentir en tu piel ese sol Y cantar y alegrarte en su luz Ya tu cuerpo renueva el color Te arde y quema el afán de cambiar La rutina romper, olvidando el ayer El verano vivir con pasión Sin pensar, ya lo ves, otro año se fue Y, en tu alma, el que viene es mejor Y la vida es un tren que debes detener En las cuatro estaciones que ves Cada cual con su olor, tú le das el color Dios te espera, siempre, en el andén Y te da la madera, el fuego y el carbón Tú le entregas vagones de fe