Ella era el agua que yo bebía Era la fuente de mi alegría Sentí orgullo de andar con ella Saberme suyo era tan bella Hoy la he perdido sangra mi pecho Pero ninguno oirá de mí un quejido Voy a guardar mi lamento para cuando yo esté solo Voy a guardar mi lamento para cuando yo esté solo Ella era el dogma que yo creía Era la ley que no infringía Era el cimiento de mi futuro Y no les miento mi amor fue puro Hoy la he perdido y sangra mi pecho Pero ninguno oirá de mí un quejido Voy a guardar mi lamento para cuando yo esté solo Voy a guardar mi lamento para cuando yo esté solo La, la, la, la, la, ...