Era un hombre de papel Era un juguete del viento Que en el cielo de la ilusión Halló su propio infierno. Y al llegar la madrugada Laberinto de intensidad En la esquina morada De la mano de soledad. En su sonrisa irresistible Se anuncia un suave cataclismo Pero el mismo amor Abre un abismo entre los dos. Yo cambiaría mi traición Por compromiso Pero en el fondo del compromiso Hay una traición mayor Nunca termina la guerra Para los hijos del terror Voy guiado por otra voz Soy indígena de una tierra Que nunca existió.