En la hora de su angustia en el huerto donde oro: Oh, padre, quítame esta copa Si hay otra solución Su plegaria fue un gemido, Su sudor se ensangrentó. Oh, Padre, ven prepárame, Yo haré tu voluntad. Y la turba le vino a tomar Pues Judas lo traicionó, Con un beso en la mejilla Al cordero entregó Y al preguntar quién era Cristo Simplemente respondió. Y la turba al suelo cayó Cuando él le contestó Contestó: yo soy El que quieren soy La verdad yo soy. Yo soy él. Me encontraron ya Si vienen por mi El camino soy Yo soy él. En la hora de mi angustia, En el huerto de mi ser, Las tinieblas me roderón y yo iba a perecer Y miré yo mi pecado, Mi corazón desfalleció: Oh padre, ven prepárame: Yo haré tu voluntad. Y miré mi vana religión A los pobres rechacé Y a tantos huerfanitos que yo nunca socorrí Y dije, oh, ven oh Dios y sáname Tu palabra espada es. Y, cuando yo clame con fe Su voz cambio mi ser.