Lejos de acá y acá Es un estado Ninguno en particular Orgulloso de sentir la vida Una caricia o un puñal O simplemente despertar Y el día Con esa magia de soñar De resbalar y no tocar el suelo Y sí, sos parte de este vuelo Prendes la llama que enciende el tiempo Mi tiempo, mi fuego Y a veces loco Me canso de esperar No me gusta pasar el tiempo pensando pavadas Sé que también las puedo no pensar Si quiero calma Llegar a lo más alto Y estallar como un cristal contra el cordón de la vereda O crecer las ganas de reencontrarme con tus huesos otra vez Lo piden mis huesos con veinte primaveras Primo de una flor que vive adentro mío Grande es este corazon Corazón de barbeta El negro Matías Damían