Hoy desperté me mire al espejo Y me doy cuenta que no es lo mismo de ayer Confundido y con mi rostro entristecido Comienzo a caer Y aquel mundo que yo había construido Lo veo desvanecer Ya no tengo esperanzas y hoy he perdido la fe Pero escuche una voz muy dentro de mí ser Que me dice levanta el rostro no te dejes vencer Que solamente es el comienzo del camino Que me tenía en sus manos y me dijo No te rindas aunque tú veas Que tu barca se hunde en la marea Aunque vengan los tropiezos y sientas dolor Hoy tu puedes hacerlo eres un vencedor He enfrentado los tropiezos que han llegado a mi vida Y he sentido que mi barca ha naufragado a la deriva Lagrimas que me ahogaron palabras que solo herían Y sueños que se destruyen cuando nadie en ti confía Pero el que valiente lucha hasta el último suspiro Y la fe en el creador es el que lo mantiene vivo Sé que tengo que esforzarme si quiero ser vencedor Y que un gran guerrero no se rinde busca ser el mejor Hoy disfruto de aquel triunfo Que un día me faje en su construcción Y vencí todos los temores frustración la desilusión Que llegaban a mi vida fueron vientos Que azotaron hasta destruir mi vida Y aprendí que las mareas algún día bajarían Y aprendí que las tormentas en su tiempo cesarían Y que al final del túnel nos espera una luz Ese rayo de esperanza la presencia de Jesús No te rindas aunque pienses que todo lo has perdido Recuerda siempre que el Señor tiene un propósito contigo