El abismo de las aguas ha venido Posando su oscuridad sobre mí alma El peso de la angustia está... sobre mí Siento como mis sueños se unden en el cielo profundo Respóndeme, no me dejes... Estoy muriendo Mis ojos desfallecen, esperándote Mi garganta enronquece de llamarte Respóndeme, no me dejes Estoy muriendo A veces mis ojos se oscurecen A veces simplemente no quieren ver más allá de la luz del cielo A veces mis ojos se nublen y extrañan las miradas de otros ojos A veces mi boca calla tantas vocales, tantos "te quiero" Y se llena de tantas mentiras, de tantos amargos reproches de los cuales mi alma se arrepiente A veces mi alma arrepentida descansa en el mar de sangre más divino y se llena de la blancura de las nubes y del olor de las flores que unas tardes vacías y grises me recordaron el amor más grande El amor de aquel que cabalga en leones alados... Eloi eloi lama savactani Mis huesos duelen por el frío de tú ausencia Respóndeme, no me dejes que estoy muriendo Apresúrate, ayúdame, no te detengas Apresúrate, ayúdame, no te detengas Respóndeme! No quites de mí tu mirada, no permitas que el abismo cierre su boca sobre mí