¡Sonoro clarín del viento, Resuene tu dulce acento, Toca, toca, ángeles provoca, Y en mil serafines, Mil dulces clarines Que, haciéndole salva, Con dulces cadencias saluden a María! Coplas Hoy que tu natal feliz, Esperado tantos siglos, Es la gloria de los cielos Y es el fin de los suspiros. Luz que al vistoso arrebol De tu cielo cristalino, Temeroso, el Sol te viste Siendo de tu luz mendigo. El espíritu de amor En las aguas del principio Navegaba en tus cristales En que se miró a sí mismo. Hoy, Señora, tu natal, Tan puro y esclarecido Dió fin a la triste pena Del más infausto delito.