Confíate a mí, como un niño Que a su padre le pide Lo que escapa a sus fuerzas Confíate a mí, como un cordero Que conoce la voz del pastor Confíate a mí, sé barro en mis manos Como la vid en manos del viñador Como pájaro, o lirio del campo Confíate a mí Confíate a mí Que conoces mi corazón Sabes que en Él está tu morada Que conmigo ningún mal te alcanza