Para cruzarlo o para no cruzarlo Ahí está el puente En la otra orilla alguien me espera Con un durazno y un país Traigo conmigo afrendas desusadas Entre ellas un paraguas de ombligo de madera Un libro con los pánicos en blanco Y una guitarra que no sé abrazar Vengo con las mejillas del insomnio Los pañuelos del mar y de las pases Pas tímidas pancartas del dolor Las liturgias del beso y de la sombra Nunca he traído tantas cosas Nunca he venido con tan poco Ahí está el puente Para cruzarlo o para no cruzarlo Yo lo voy a cruzar Sin prevenciones En la otra orilla alguien me espera Con um durazno y un país.