Camino sólo, te busco en la inmensidad Pierdo tu rastro al llegar al mar Creo que tus labios se ocultan bajo el disfraz Que cada día vas tejiendo por no amar Por no amar la lluvia que rompe contra el cristal Dejando la huella de los besos que se van De esos besos tristes que debieron naufragar En algún lugar entre la guerra y la paz De la guerra y la paz que esconde nuestra verdad De aquel beso robado que vuelve ahora que no estás No estás en la calle que ha gritado nuestro nombre Tampoco en el coche aparcado en tu portal Portal donde fuimos dos ángeles caídos Viendo crecer la flor que el otoño ya olvidó De un olvido que mancha esta cama ya vacía Cuando despierto en silencio sudando soledad fría Fría y malherida, qué absurda melancolía Vuelve otra vez a la calle y en silencio arranca el coche Para huir hacia el mar, lejos ya de esta ciudad Y escapar del final que siempre acaba igual