Es una historia singular Te vi pasar y ahora no te puedo ver. Y está demás todo lo que pueda pasar Yo ya lo sé. Que nada me puede cambiar. El tiempo gira en la pared Por el espejo del placard que reflejás Cuando te vas, cuando volvés, cuánto querés, cuánto tenés. Y nada lo puede parar. Y en la oscura habitación Caí en la cuenta de que ya no somos dos. Pisé un pedazo de papel Era el recibo del que hoy Compró tu corazón. Pagó tu ropa interior. Si ya no hay excitación, No hay misterio y emoción para los dos. Y el reloj que hasta las tres Marcó las horas que después Ya no regresarán. Ahora el catre se oxidó Por la gotera del colchón Que al lado mío se quedó. Eso tal vez quiere decir Que de los dos sería yoo. .Sería yo, el que se tiene que ir.