Cuando las bocas comen silencio Cuando los ojos miran "pa" dentro Fría desidia mató las palabras Hoy abandono, ni el perro me ladra Cuando el susurro se esconde en vergüenza Cuando eres tú, tu única audiencia Fría desidia que acaba pudriendo La magia del niño que llevabas dentro Cuando los días nacen atardeciendo Cuando la vida no encuentra el momento Triste apatía silencia al que canta Ideas que mueren, luchas que se apagan Cuando el amor tira del cerrojo Cuando el deseo mira de reojo Triste apatía que seca los cuerpos Olvida la vida, ya hueles a muerto Enterrado en tu trinchera; el miedo no tiene rival Ya bajaste la escalera, afuera ya todo da igual Enterrado en tu trinchera; quien muera podrá descansar Ahora tu ya eres cualquiera; muñeco, que pena me das Cuando los dientes mascan poderosos Cuando te tiras sin agua en el pozo Libre albedrio que nos hace fuertes Remata la ley, renace tu mente Cuando los viejos gritan revolución Cuando pone el chiquillo la piedra en el cañón Libre albedrio, nacemos sin dueños Su sepultura da sentido a mis sueños Enterrado en tu trinchera; el miedo no tiene rival Ya bajaste la escalera, afuera ya todo da igual Enterrado en tu trinchera; quien muera podrá descansar Ahora tu ya eres cualquiera; muñeco, que pena me das Bajaste aquella escalera Afuera todo da igual No dudes más Nadie te va a ayudar No grites más Tu hueco puedes llenar Enterrado en tu trinchera; el miedo no tiene rival Ya bajaste la escalera, afuera ya todo da igual Enterrado en tu trinchera; quien muera podrá descansar Ahora tu ya eres cualquiera; muñeco, que pena me das