Doce campanadas, tres en silencio. Un limón abierto sobre el portal Quema las entrañas, sabor amargo. Tres palabras sordas, un grito de espanto; Curva carretera en un cielo gris; Trataba de calar tus oídos parchados, Tu sangre de antaño. Nada de esto sería extraño Si en mi recuerdo pudiera ver Un sol en que tú no estás, Un rayo de falsedad, Dime, quién? El sol se ha dormido; ya ha escuchado La guerra de palabras, paz de cartón; Cayó en un mar de lágrimas secas, Sobre un colchón de piedra. Oh, Nada de esto sería extraño Si en mi recuerdo pudiera ver Un sol en que tú no estás, Un rayo de falsedad Oh! Oh! Oh! Tres palabras sordas, un grito de espanto, Curva carretera en un cielo gris... Nada de esto sería extraño Si en mi recuerdo pudiera ver Un sol en que tú no estás, Un rayo de falsedad! Uh, oh, Uh, oh! Un sol en que tú no estás, Un rayo de falsedad, Dime, ¿quién lo cambió?