Llegó el borracho buscando a su amigo el cantinero Le dijo abre la taberna, quiero gastar mi dinero Estoy de nuevo en mi pueblo y quiero que celebremos Le contestó el cantinero: "aquí, ya no vendo vino" Desde que oí el Evangelio, Cristo cambió mi destino Te invito que dejes el vicio, vente a la iglesia conmigo Y borracho y cantinero a Cristo se convirtieron Uno cerró la taberna y el otro se ahorró el dinero Ahora los dos se dedican solo hablar del Evangelio Le platicó el cantinero: "yo andaba ciego y perdido" Y de este antro de vicio, de allí me, rescató Cristo Hoy llevo dentro de mi alma, la paz que no me dio el vicio Y borracho y cantinero a Cristo se convirtieron Uno cerró la taberna y el otro se ahorró el dinero Ahora los dos se dedican solo hablar del Evangelio Y borracho y cantinero a Cristo se convirtieron Uno cerró la taberna y el otro se ahorró el dinero Ahora los dos se dedican solo hablar del Evangelio