Y nada que decir Si cada vez que estás rozándote en mi almohada, Y nada que ocultar si cada vez que tu Ya no me dices nada, Si cada vez que estoy perdiéndome en tu vida, Si cada vez que tú no estás... Llamas y dices que ya no es por nada, Que en cada despertar que ya no estabas, Sin estar, aún estabas... Que sólo tu perfume me llevaba a cada oscuridad, Que bajo el manto de la luz temblabas, Y no sientes nada, nada... Si cada vez que tú, Te giras y te vas, y no sueltas palabra... Sin nada que ocultar, si es solamente tú La que me importas nada más... Si cada vez que intento ser feliz y echar a caminar, Si cada vez te vuelvo a descubrir. Llamas y dices que ya no es por nada, Que en cada despertar que ya no estabas Sin estar, aún estabas... Que sólo tu perfume me llevaba a cada oscuridad, Que bajo el manto de la luz temblabas Y no sientes nada, No sientes nada, No sientes nada... Y hablas, me dejas en silencio y sin palabras, Se rompen los broches de tu mirada, Me dejas enredándome en tu cama Donde nos amamos, donde compartimos sin palabras... Toda la tempestad que nos llevaba Hacia la dulce hoguera que arde en llamas, Y sigues enredándome en tu cama Donde nos amamos, donde compartimos sin palabras Y no sientes nada, nada... Si cada vez que tú, te giras y te vas Y no sueltas palabra.