Alma mía, sola; siempre sola Sin que nadie comprenda tu sufrimiento Tu horrible padecer Fingiendo una existencia siempre llena De dicha y de placer, de dicha y de placer Si yo encontrara un alma como la mía Cuántas cosas secretas le contaría Un alma que al mirarme, sin decir nada Me lo dijera todo con la mirada Un alma que embriagase con suave aliento Que, al besarme, sintiera lo que yo siento Y a veces me pregunto qué pasaría Si yo encontrara un alma Si yo encontrara un alma como la mía ♪ Tú me acostumbraste a todas esas cosas Y tú me enseñaste que son maravillosas Sutil, llegaste a mí como la tentación Llenando de inquietud mi corazón Yo no concebía cómo se quería En tu mundo raro y por ti aprendí Por eso, me pregunto, al ver que me olvidaste ¿Por qué no me enseñaste cómo se vive sin ti? ¿Por qué no me enseñaste cómo se vive, cómo se vive sin ti? En el canto de las olas, encontré un rumor de luz Por un canto de gaviotas, supe que allí estabas tú Despidiendo, últimamente, todo lo que sucedió Hoy saludo a mi presente y gusto de este dulce adiós Voy a navegar en tu puerto azul Quisiera saber de dónde vienes tú Vamos a dejar que el tiempo pare Ver nuestros recuerdos en los mares Y esta soledad tan profunda Que en el canto de las olas me quisiera sumergir Embriagándome en su aroma, algo nuevo descubrí Voy a navegar en tu puerto azul Quisiera saber de dónde vienes tú Vamos a dejar que el tiempo pare Ver nuestros recuerdos en los mares Y esta soledad tan profunda Que me cante el mar Un bolero de soledad Que me cante el mar Que ando sola con soledad Que me cante el mar Un bolero de soledad Que me cante el mar Que ando sola con soledad Soledad y el mar