Una señorita y yo jugamos con el amor Sentados en un sillón que atardecía Pero ella no quise ser en el juego mi mujer Me di cuenta tiritando que no entendía Bailaba a los 16 el tango de Lucifer Era la primera vez que andaban en mis sentidos Unos sentimientos Llenos de secretos Balbuceantes, temerosos, pero míos, míos Al final la convencí que no era un juego vivir Y decidimos continuar amándonos en serio Aquella tarde especial, aunque estaba todo igual La vida nos revelaba un nuevo misterio Lo prohibido nos llevó a conocernos tú y yo Pasaron años después, los chicos ya suman tres Y ese tango suena, ruge por mis venas Y es que siempre, señorita, tu vida exita Lo prohibido nos llevó a conocernos tú y yo Pasaron años después, los chicos ya suman tres Y ese tango suena, ruge por mis venas Y es que siempre, señorita, tu vida me exita