Mi mano en tu pecho remece la luna Que vive en tu boca y que bebe mi sangre Que corre en tu huerto, que crece tan vivo Tan vivo que sabe de mí lo que es cierto Es tan cierto que ando como un niño libre Libre del pasado y libre del invierno En un recorrido de suave silencio Silencio que sólo nos permite un beso Un beso que rompa y que mate al tiempo Que espere en la esquina nuestra caminata Que sea promesa que todo es eterno Eterna la luna como nuestro aliento Que sea promesa que todo es eterno Eterna la luna como nuestro aliento Mi mano en tu pecho remece el sonido Sonido que ahuyenta todo el sufrimiento Que sea promesa que todo es eterno Eterna la vida como nuestro aliento