Somos madero en deriva dentro y fuera de la costa, Somos bardos sin silencio con algunas libertades, Porque todo prisionero, de sí mismo extrae verdades, Aunque la verdad no existe. Somos algunas razones con bastante fundamento, Somos lo que busca, a tientas, un futuro que persiste En dejarnos como atados, no en mostrarnos como libres, Pues la libertad no existe. Somos parte de los pasos de la historia cotidiana, Somos como una ventana Que espera que un ojo mire para anunciar su mañana. Como una veleta nueva que no sabe dirigirse, Porque siempre los caminos, Son pocos para escogerse y largos para seguirse. Somos piedra sobre piedra, piedras de generaciones, Que actuamos como mortales y pensamos como flores, Porque una flor es la prueba, de que en medio de lo triste, Lo sensible lo renueva.