Para qué dormir de más Si no queda nada por soñar despiertos Para qué mi cama abierta, Si no estás ni estarás, Ni quiere el cuerpo. Para qué pensar de más, Lo que supo remontarse con el viento No hay tirante que resista el vendaval Si abandona el sentimiento. Y soy tristeza empezando a remar Caracol resguardando tu mar Que se quiebra en ganas de llorar. Lenta despedida en espiral. Para qué guardar un As Que habilite ver el juego en otro tiempo, Para qué dejar pendiente la verdad En la magia del encuentro. Y soy tristeza empezando a remar, Caracol resguardando tu mar Que se quiebra en ganas de llorar. Lenta despedida en espiral.