Lo miraron en el viejo bar del pueblo Bien borracho por el luto y la tristeza "Ya no hay vino" le gritaba el cantinero Tenía el piso tapizado de botellas Y salió trastabillando por tan ebrio Cuando solo le alumbraban las estrellas Tropezando y rodando a cada paso Poco a poco abandonó su viejo pueblo Un macabro sentimiento lo impulsaba Qué profundo es el cariño verdadero Y el amor y la pasión que le guardaba Lo llevaron a buscarla al cementerio Con el ansia que sentía de mirarla Como loco comenzó a excavar la tierra Esa noche hasta las uñas le sangraban Pero pronto vio la fosa descubierta Alguien dijo que de gusto hasta gritaba Y pensaba que clamaba un alma en pena Le miraba las mejillas arrugadas Y el amante la creía estar sonriendo La encontró ya con el cuerpo demacrado Y aún así el la colmaba con sus besos De sus ojos solo el hueco le quedaba Pero a él le parecían dos luceros Nadie duda de una entrega apasionada Porque ahí con ella la encontraron muerto Hay quien dice que fue un acto desquiciado Otros dicen que fue peor que un sacrilegio Yo les digo que el cariño de aquel hombre Desde entonces es eterno allá en el cielo