Al olvido rezo yo Y a los relojes de arena Sin haber pactado nada Levantaste una frontera Del aceite hacías oro Y con oro una vajilla Con la que cenar de noche Y alimentarse de día El tañer de las campanas Señaló el momento justo Enraizado en los pulmones No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada Al olvido rezo yo Del dolor que me has causado Que se quede al otro lado Por lo menos la mitad En la esquina de tu boca Y en tu cara de romero Yo te cantaba saeta, Mientras tú de costalero El tañer de las campanas Señaló el momento justo Enraizado en los pulmones No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada (...) No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada (...) No me hieras más No me hieras más No me hieras más Venga el alba después O no venga nada